Hoy, en el Día Nacional del Niño con Cáncer, el país se une para conmemorar la valentía de niños y niñas que enfrentan esta enfermedad con una fortaleza admirable, así como el amor incondicional y la resiliencia de sus familias, quienes los acompañan en cada paso de este camino.

Esta fecha invita no solo a la reflexión, sino también a la acción colectiva: cuidar, acompañar y proteger los sueños de la niñez es una responsabilidad compartida entre las instituciones, el sector salud y la sociedad en general. Detrás de cada diagnóstico hay una historia de lucha, esperanza y amor que merece atención integral, trato digno y acceso oportuno a servicios de salud de calidad.

Conmemorar este día es reconocer que el acompañamiento emocional, el apoyo social y la solidaridad pueden marcar la diferencia en la vida de quienes enfrentan esta realidad. Hoy alzamos la voz para reafirmar nuestro compromiso con la vida, la niñez y el derecho a soñar, incluso en medio de la adversidad. ¿Cómo seguir construyendo entornos más humanos y solidarios para nuestros niños y sus familias?